Guía completa sobre cómo elegir una caldera de gas

Es uno de los principales electrodomésticos de tu casa. Y si se te estropea la caldera de gas para calefacción y agua caliente en pleno invierno, te aseguro que no estarás en el mejor momento para ponerte a elegir una nueva caldera acorde con tus necesidades.

Por eso, hoy quiero mostrarte todas las claves que debes tener en cuenta a la hora de elegir y comprar tu nueva caldera de gas.

Tu objetivo es ahorrar energía a largo plazo; y eso lo conseguirás sólo si tienes en cuenta dos factores: rendimiento y eficiencia.

Veamos todo lo que debes saber para hacer la elección perfecta de tu caldera de gas.

¿Qué tipos de calderas existen?

Antes de tomar la decisión sobre qué caldera es la más adecuada para tu hogar, voy a enseñarte los diferentes tipos de calderas que puedes encontrar en el mercado.

 

Debes prestar atención a tres aspectos importantes. 

Calderas de calefacción en función del combustible

Normalmente, el combustible no lo eliges tú porque ya viene con tu vivienda. Sin embargo, no viene mal que conozcas los tipos de combustibles fósiles que se comercializan en España.

Caldera de gas natural: se engancha a la red canalizada de la calle, que ya está construida, a través de una acometida.

Este tipo de combustible es el más utilizado en toda España debido, principalmente, a que es el menos contaminante de todos.

Caldera de gas propano: el gas propano posee un gran poder calorífico y tiene la ventaja de que puede llegar a prácticamente cualquier parte. A través de botellas (11 o 35 kilos de capacidad, dependiendo del tamaño de la instalación) o a través de depósitos de almacenamiento que van desde 2.450 litros hasta 20.000 litros de capacidad.

Aunque ya te confirmo que para tu vivienda lo más habitual es elegir el almacenamiento en botellas de 35 kilos o un pequeño depósito de 2.450 litros.

Caldera de gasoil: es una alternativa que mucha gente sigue prefiriendo, especialmente en el mundo rural. Es de muy fácil instalación y mantenimiento.

La caldera siempre va enganchada a un depósito de este combustible que, dependiendo del tamaño y características de la vivienda, será de una capacidad u otra.

El gasoil también tiene un poder calorífico superior al gas natural. Además, algo muy importante para tu seguridad es que es un combustible que no se inflama a bajas temperaturas.

Tipos de caldera según su funcionamiento

Esta clasificación está basada en la combustión de la caldera de gas. Existen dos tipos de calderas en base a esta clasificación.

Caldera de condensación

Desde el año 2015 todos los fabricantes de calderas de gas están apostando por este sistema de combustión.

Y es que las calderas de condensación aprovechan los gases procedentes de la combustión para calentar el agua. Esto ya es una importante ventaja para ayudarte a ahorrar energía.

Esto supone hasta un 30% de ahorro con respecto a otras calderas. Su rendimiento llega fácilmente al 100% ya que aprovechan todos lo gases que emite la combustión, ¿te imaginas cuánto gas te ayudan a ahorrar estas calderas de condensación?

Una ventaja muy buena para el medio ambiente es que se producen menos emisiones de CO2 a la atmósfera.

Además, cuando instales tu nueva caldera de condensación no te olvides de preguntar en la oficina de tu comunidad autónoma, porque aún hoy algunas conceden subvenciones para la instalación de este tipo de calderas tan ecológico y limpio para el medio ambiente.

Caldera de baja temperatura

Es un tipo de caldera no tan conocida como la anterior que te comentaba en este artículo.

Pero merece una mención porque esta caldera regula la temperatura del agua en función de la temperatura exterior. De esta manera, ajusta su rendimiento al máximo evitando el derroche de energía.

Sin embargo, la normativa española no permite la instalación de este tipo de calderas en viviendas de obra nueva. Por tanto, aunque es una alternativa a la caldera de condensación, no se le presta toda la atención que merece.

Las antiguas calderas atmosféricas y estancas

Si aún tienes en casa alguna de éstas dos calderas y quieres cambiarla, ya no podrás volver a tener el mismo sistema debido a que han sido prohibidas.

-Calderas atmosféricas: están prohibidas desde el año 2010. Eran las que tomaban aire de la estancia donde estaban instaladas para la combustión.

Debido a su alto índice de contaminación, además del riesgo que suponía su funcionamiento, su fabricación, comercialización e instalación quedó prohibida hace ya ocho años.

-Calderas estancas: su chimenea estaba formada por dos tubos concéntricos. Cogían el aire de la calle para la combustión a través del tubo exterior, y expulsaban el humo por el tubo interior.

Al igual que las atmosféricas, las calderas estancas fueron prohibidas por la Unión Europea en el año 2015. Y es que aunque la combustión resultaba mucho más segura para los habitantes de la vivienda, tampoco eran eficientes.

Por eso, la mejor alternativa es cualquiera de las que te comento más arriba. De todas formas, puedes consultarnos sin compromiso en el 937.330.382. 

Ésto es lo que debes tener en cuenta a la hora de saber elegir tu nueva caldera de gas

Antes de tomar ninguna decisión respecto a tu nueva caldera de gas, quiero enseñarte cómo puedes saber qué caldera es la que necesita tu hogar.

Para ello, debes tener en cuenta estos aspectos.

Tipo de vivienda y su zona geográfica

Esto que voy a contarte es obvio pero debes tenerlo muy en cuenta. Y es que no es lo mismo una vivienda unifamiliar que una vivienda en altura, un piso.

Un dato muy importante es la climatología de la zona donde vives. Es esencial que tu instalador de calefacción te haga el estudio correcto del dimensionado para la instalación de tu calefacción y agua caliente sanitaria.

No es bueno tener una instalación sobredimensionada, con el consiguiente gasto innecesario de energía y dinero que conlleva. Como tampoco es adecuado tener una instalación infradimensionada, algo que también te hará gastar más dinero y nunca alcanzarás el confort adecuado en casa.

También debes tener en cuenta el aislamiento que tiene tu vivienda. Esto te lo indica el certificado de eficiencia energética de la casa.

Tipo de combustible disponible

Como ya te he comentado antes, en muchas ocasiones tú no puedes elegir qué tipo de combustible quieres consumir. Aún así, es bueno que conozcas cuál es el que está disponible en la zona de tu vivienda.

Aunque si tienes una vivienda unifamiliar y dispones de espacio acorde con la normativa vigente, puedes instalar un depósito de gas propano o gasoil, en caso de que no te convenza el gas natural.

Número de baños de la vivienda

Este dato es fundamental aunque no parezca relevante. Cualquier profesional lo tendrá muy en cuenta; porque no es lo mismo una vivienda con 3 baños completos que otra con 2 baños completos y 1 aseo, por ejemplo.

¿Cuánta potencia es necesaria?

Con la información que te he facilitado en el apartado anterior y con la ayuda de la tabla que te muestro a continuación, tú mismo puedes saber cuál es la potencia que necesita la caldera de gas para tu vivienda.

	Nº de baños	Potencia en KW (ACS)*	Potencia calefacción (KW)
Hasta 100 m2	1	24	24
Hasta 180 m2	2	28	24
Hasta 180 m2	3	35	28
Más de 180 m2	Más de 3	35 + acumulación	30

*Agua caliente sanitaria

Voy a ponerte unos sencillos ejemplos para que no tengas ninguna duda:

¿Qué caldera necesitas para 100 metros cuadrados y dos baños?

• Tipo de caldera: condensación / mixta
• Potencia: 21,2 kW para calefacción y 24,3 kW para agua.
• Clasificación energética: A

¿Y si tienes 150 metros cuadrado y 3 baños?

• Tipo de caldera: condensación / mixta
• Potencia: 30,6 kW para calefacción y 33 kW para agua.
• Clasificación energética: A

Espero que esta guía te ayude a la hora de tener claro qué caldera es la que necesita tu vivienda.

¿Tienes alguna duda?, ¿ya elegiste caldera?, ¡Cuéntanos!